El sector inmobiliario español esta apostando todas sus cartas a la inversión en la construcción y reposicionamiento de centros comerciales en todo el territorio. Tras una renovación del modelo y algunos cierres en los últimos años, estos complejos están levantando el vuelo con nuevas aperturas y más ventas.
En 2017 se abrieron cinco centros comerciales y tan sólo este año se estima la inauguración de entre cinco y diez nuevos, mientras que en los próximos tres años se desarrollarán alrededor de 30 nuevos proyectos en todo el país. Aunque las aperturas actuales distan mucho de la veintena de aperturas anuales en el período anterior a la crisis, estas cifras indican que el mercado español ya es lo suficientemente maduro como para no volver al nivel de promoción pre-crisis.
Pues en los últimos años la inversión en el sector era escasa y se estaba convirtiendo en un mercado obsoleto, las socimis y las grandes gestoras de fondos nacionales e internacionales están mostrando actualmente mucho interés por comprar este tipo de activos, sobre todo para ser renovados y reposicionados ampliando su categoría de servicios.
La idea es convertirlos en lugares que ofrecen experiencias diferenciadoras a la hora de comprar, que sean nuevos puntos de encuentro y de interacción social, con una amplia oferta de ocio, restauración moda y comercio.
Madrid, Barcelona y Valencia son las ciudades más dinámicas, más atractivas y con mayor potencial para los comerciantes internacionales e inversores.
Los centros comerciales y la llegada del e-commerce
El comercio electrónico y la sobreoferta han puesto en jaque a este modelo de negocio. Sin embargo, estos complejos continúan estando presentes en el consumo de los españoles, logrando aumentar su cuota de mercado y creciendo más de lo que lo hace el consumo privado en su mercado de referencia.
Lo que esta sucediendo es que los centros comerciales se están subiendo a la ola del comercio online para reinventarse, jugando un papel relevante en el retail, recurriendo a fusiones y adquisiciones de competidores para mejorar su posicionamiento en el mercado. Además, muchas tiendas que antes solo se dedicaban a la venta online están empezando a lanzar sus tiendas físicas.
Otras de las alternativas al e-commerce, y que se está pensando instalar en centros comerciales periféricos, es que estos se utilicen como hub logístico para la venta online de cercanía, para recoger producto o devolverlo.
Aumento del consumo y las ventas
La mejora en el ingreso de las familias ha provocado un aumento del consumo y las ventas, lo que se ha traducido en rentas más elevadas. También las transacciones se están beneficiando del buen momento del retail español, con yields cercanos al pico anterior a la crisis para activos super prime, de entre el 4% y el 4,25%.
Complejos de uso mixto
Los centros comerciales se están diseñando para el uso mixto, sobre todo en el centro de las ciudades, donde se combina su uso comercial con el de oficinas. Centros comerciales, como en el caso de Estados Unidos, reconvertidos en colegios, universidades, mini apartamentos, hoteles o bibliotecas.